Mira mija, pa’ que dejes de andar quejándote, te voy a dar unas cuantas sugerencias pa’ que vivas bien y no nomás sobrevivas…¡Mírame a mí, estoy en la flor de la vida y me sigo riendo !.
Estos consejos de la abuela, que seguramente surgen de sus innumerables experiencias a lo largo de la vida, no harán que las personas sean diferentes, ni evitarán que los malos momentos lleguen, pero te permitirán ubicar cada cosa en su lugar y tal vez te ahorren algunas frustraciones y desencantos.
Reír y disfrutar aprovechando lo que la vida nos da y sin lamentar lo que nos falta, parece ser la base de la felicidad. Esta abuela bien franca y honesta nos revela esta verdad innegable de una manera muy particular.
1.- Agradece por todo
No te quejes, dale gracias a Dios que estás, que sigues y que vives, nomás piensa que a otra bola de gente ya se la llevó…¡la vida!
2.- Cuando puedas comer… come
cuando puedas dormir, duerme, cuando puedas disfrutar, disfruta, cuando puedas trabajar, trabaja,
y si aún puedes, échate unos traguitos, juega con los hijos, haz el amor o ponte a silbar, a cantar en el baño y da gracias a Dios porque tienes Salud.
No te la pases quejando: ¡Ayyy si hubieraaaa!… ¡Ayyy les di!… ¡Ayyy si tuviera… ¡Cuánto sacrificio!… ¡No mijita, altas y bajas siempre han habido y siempre habrán!
3.- Si en la noche no puedes dormir
sí estás vuelta y vuelta en la cama, pos’ párate y ponte a hacer algo: arregla un cajón, plancha tu blusa pa’ mañana, ponte a leer, porque si te quedas acostada con los ojos abiertos… ¡vas pensar puras huevadas! Y lo “pior” es que te paras y las haces… ¡Ya de por sí!
4.- Los problemas grandotes
Esos que son del mundo y que se oyen en la televisión, que sí se está calentando el planeta, que sí a tal país ya se le llevaron los dineros, que si los narcos… ¿esos mija? Mándalos a la m%&#” ¡No los vas a arreglar tú! Luego ni les entiendes,
¡No te hagas bolas! Deja que los que pueden, los arreglen. Pero tú, ocúpate de los que se ven más chiquitos, esos que sí están en tus manos. Despabílate, aunque sea a ratos, atiende esos, los demás ¡A la p#$%& madre!
5.- Si te dan… agarra todo lo que te den!
Agárralo, aprovéchalo, así sea un beso o una pendejadita,
porque uno vive pensando que las cosas las genera uno, pero no sabes de qué forma te llegan… ¡Así que tú agarra y no te acobardes!
6.- ¡Ahhh! pero eso si…
¡No agarres lo que no es tuyo¡ Ni la bicicleta, ni la bolsa, ni el dinero, ni al marido o amante de otra, lo ajeno respétalo, es de otra, cada quien tiene lo suyo: ¡Lo que se gana y lo que se merece!
7.- Lo que hagas hazlo con ganas
Con muchas ganas y mucho gusto y hazlo bien o no lo hagas y déjate de pendejadas, olvídate de las envidias. Tú a lo tuyo!
8.- Cuídate de las cabronas y aléjate de las pendejas
Fíjate bien como son, porque ¡Hay malvadas!, Conócelas y nunca seas como ellas. Ayuda y escucha a tus amigas, no hables mal de la gente: ni de las cabronas, ni de las pendejas… sé orgullosa, pero no seas arrogante ni prepotente.
Sé humilde, no agachada; sé valiente, no imprudente. Cuando ganes, sonríe, cuando pierdas, no armes un escándalo, y si te da la gana… llora!
9.- Nunca te preocupes por lo que no tienes
O por lo que no puedes comprar… cuántas cabronas que tienen todo el dinero del mundo están solas, en la cárcel, enfermas de la cabeza, o guardadas en un hospital, asustadas e inseguras, o tienen un marido pendejo… ¡No son felices! No saben comunicarse, no tienen una familia como la tuya. Tú tienes algo más valioso que es tu gente y tu salud.
10.- Manda a la m#$%& la Muerte
Que sea ella la que se preocupe por no poderte llevar,
y no seas tú la que se preocupe porque ya te va a llevar!
¿Así o más claro?
Y por último mijita, si la vida te da limones…
– ¡Qué limonada, ni qué nada!
TU PIDE TEQUILA, SAL…. Y SALUD!